Desde que tengo memoria tengo una obsesión por los viajes… amo viajar, es mi gran placer en la vida. Continuamente ocupo mi tiempo soñando y planeando viajes, tengo listas de viajes por hacer y en mis propósitos del año siempre hay, mínimo, un viaje…. Para mi hay muchos tipos de viajes, y así están clasificadas mis listas, pero este viaje…. este viaje fue diferente…
Un viaje jamás soñado, jamás pensado, un viaje que nunca entró en mis listas… un viaje conmigo misma, un viaje que me regaló la vida.
Y hoy, puedo decir lo que este viaje me dijo:
- Gratitud: infinita gratitud, por los míos, por mi vida, por mi hoy, por mi libertad, por mi independencia.
- Reconocer: no solo en el sentido de valorar y reconocer lo valioso, lo valioso en mi y en los que tengo a mi alrededor…. Sino también, re-conocer, volver a conocerme, a mi y a los míos. A mi como mujer, mamá y profesional y a los míos con un valor incalculable.
- No-control: soltar el control, soltar soltar soltar… disfrutar al soltar, entender el valor en soltar y agradecer por esto. Descubrir lo maravilloso que pasa cuando soltamos y nos dejamos dar sorpresas.
- Reconciliación: sanar, amar, seguir…
- Descanso: para la mente, para el cuerpo, para el alma, para mi, para todos.
Y por último, PAZ.
Gracias vida por este regalo. Gracias Kanguritos de mi corazón por tocarme la vida de tantas maneras 💙