Te amo hijo!

“Te amo hijo”, la frase que más le digo a Simón en el día: para despertarlo, cuando se va al colegio, cuando lo recojo, cuando está ofuscado, cuando está feliz, cuando estamos jugando, cuando se duerme…

Y la frase es la misma, pero significa tantas cosas!!! Hay días que va cargada de orgullo, del orgullo de ser su mamá; hay días que está cargada de alegría, la alegría de verlo crecer, aprender y ser feliz; hay días que está cargada de risas, como cuando me preguntó a todo volumen de que estaba disfrazada la señora que estaba a mi lado en el ascensor; hay días que está cargada de paciencia, como cuando no consigue calmarse para hablarme; hay días que es inevitable cargarla con un tinte de angustia y miedo, el miedo que da cuando me pregunto a dónde va este camino? Dónde llegaremos? Dónde llegaré? Dónde llegará él?; hay días que significa humildad, como cuando le pido perdón por equivocarme, ofuscarme o decirle cosas que no lo hacen sentir bien… y algunos pocos días duele, duele amarlo tanto, querer cuidarlo y protegerlo del mundo pero saber que tengo que darle alas y dejarlo enfrentarse al camino que tiene que enfrentarse….

Pero finalmente, siempre se resume en esto: Te amo hijo! Con un amor que no tiene explicación, un amor que va más allá de mi y mi entendimiento! Te amo hijo! Y amo ser tu mamá!